Descripción:

Este acueducto romano es el hito más famoso y sobresaliente del complejo sistema de abastecimiento de agua desde el río Frío, situado a 17 kilómetros de la ciudad, y que constaba de un canal de sillería de más de 15 km de longitud antes de llegar a un desarenador con estanque de 4,25 x 2,18 m en planta y 2,60 m de profundidad, que daba paso a un tramo en muro de 65 m de longitud y 1,85 de altura que en un cambio de dirección conecta con la primera y segunda arquerías. Otro cambio brusco coincide con el arranque de la gran arquería principal que permitía salvar un valle en el que hoy se sitúa la plaza el Azoguejo, y así llevar el agua hasta el Alcázar de la ciudad situado al otro lado.

El acueducto fue construido en los tiempos del emperador Trajano hacia el final del siglo I. Cuenta con una pendiente uniforme del 1 % que garantizaba la circulación del agua. El tramo central del acueducto consiste en dos arcadas superpuestas de 44 arcos que alcanza una altura máxima de 28 metros. En total, consta de 167 arcos cuyas luces oscilan alrededor de los 4,90 m mientras que las pilas lo hacen alrededor de 1,30 m. Los arcos fueron ejecutados con más de 24.000 sillares graníticos almohadillados de la Sierra de Guadarrama cortados con precisión y colocados a hueso, sin argamasa alguna. Sobre ellos, una hilera de sillares forma un dintel que estabiliza la estructura, y sobre el que se sitúa la caja del canal de 30 x 30 cm.

El acueducto se mantuvo en uso durante casi 2000 años, lo que ha permitido su magnífica conservación, aunque sin identificables, algunas reparaciones y restauraciones en diversos momentos históricos, como en tiempos de los Reyes Católicos, en los que levantaron algunos arcos apuntados. También de esa época data la colocación de sendas estatuas de la Virgen de la Fuencisla, patrona de Segovia, y de San Sebastián. A finales del siglo XX se restauró el monumento puesto que la contaminación del tráfico que pasaba bajo sus arcos centrales había deteriorado severamente el granito de los sillares.

De todos los acueductos romanos que se conservan, es el que más destaca por su esbeltez. Las pilas de sección variable, en ambas direcciones, del tramo central, optimizan el material y, junto a la sucesión de cornisas que aparecen en cada uno de estos cambios de sección, marcan los ritmos que hacen inconfundible la imagen de esta magnífica obra.

La ciudad vieja de Segovia y su acueducto están inscritos en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO desde el año 1985, y además, el acueducto de Segovia es la única obra pública española designada como Civil Engneering Landmark (hito de la ingeniería civil) por la ASCE, American Society of Civil Engineers.

FMA y UCLM

Bibliografía:

Acueducto de Segovia. En Patrimonio Web de la Junta de Castilla y León.

http://servicios.jcyl.es/pweb/datos.do?numero=11669&tipo=inmueble&ruta=

Fernandez Casado, C- (1968) “Acueducto de Segovia”, Informes de la Construcción, vol. 21, nº 210, pp. 63-126.

Ramírez Gallardo, A. (1993) “El Acueducto de Segvia”, Revista de Obras Públicas, vol. 140, nº 3322, pp. 7-18.

Valoración: